martes, 18 de marzo de 2014

Futuro









A veces cierro los ojos y observo. Los abro y no veo.
Observo la vida pasada y pienso en lo que vendrá. 

Me olvido del instante, de este momento. 
Inconformista me dicen. Y yo afirmo, Si. Inconformista por naturaleza. 

Futuro dime ¿tienes algo para mí? 

No te pido trabajo, ni dinero, ni siquiera salud. De todo eso debo encargarme yo. 
Sólo te pregunto cómo de extenso serás. No quiero que te acabes nunca, Futuro, porque no quiero que termine todo el tiempo que invierto pensando en ti.
Ni quiero que se esfumen vidas que amo, ni que se acaben esos besos lentos, Futuro.
Porque si así fuera, ¿qué observaría al cerrar los ojos? Nada. No me gusta esa palabra.
Ilusión es lo que me lleva a ti, Futuro, y así quiero que sea hasta el día en el que ya no existas. 

Porque yo no voy a reencarnarme, ni a resucitar. 
Porque cuando te acabes, Futuro, ojalá no necesite cerrar los ojos para seguir pensando en ti.
Ojalá los cierre y pueda mirar el presente satisfecha, y c'est fini.


Así que Futuro, con tus obstáculos, con tus porvenires, con tus sustos, con tus tragedias, con tus momentos, todos ellos, sigue ahí mucho tiempo, y déjame esforzarme por conseguir lo que cada día, al cerrar los ojos, veo.
O al menos parte de ello.

Lucy Bretonnie

No hay comentarios:

Publicar un comentario