sábado, 19 de febrero de 2011

Yo coloreo, Tu coloreas, Él colorea...


Los colores, que se mezclan, y a veces, llegan a enturbiarse. 
Es entonces cuando preferimos, volver a la época del blanco y negro o incluso del sepia. 
Momentos en los que nos apetece ver todo igual, todo, en la gama grisácea. 
Sin embargo, ahí están los lapiceros rojo, azul y verde. Ellos son según Goethe, los primarios. 
Pintamos con ellos y al fusionarlos, obtenemos secundarios y terciarios.