domingo, 26 de agosto de 2012

Fin de la estación que esperamos


El fin de la rutina para dar la bienvenida a meses, semanas y días de nuevos recuerdos.
Amistades que volvemos a encontrar, nuevas vivencias que vendrán. Aventura.

La playa, ya sea con brisa marina o con calor húmedo y pegajoso que no nos deja respirar. 
El moreno que normalmente buscamos para que luzcan las prendas de colores suaves, bonitos o quizás intensos. 

Ligereza y relax.

O puede que sigamos trabajando en nuestros proyectos. Esforzándonos.

Conducir sin mapa hacia lugares escondidos o usar un gps para llegar a nuestros destinos. 

Bajar al portal y al fin tener lo que ansiábamos. 
Sorpresas inesperadas. 

El agua caliente del mar y las duchas heladoras. 
Períodos de festival, música y nada más. 
Arena con la que crear figuras. Quizás gatos que no lo parecen. 

Las fotografías, para cuando nuestra memoria necesite recordar esos momentos de felicidad. 

Cuando nos echamos de menos y esperamos regresar.
Hamacas y cachimbas mentoladas.
Cervezas en calas perdidas y también en terrazas nocturnas. 

Hacer planes, preparar e inaugurar una nueva vivienda. 
Aburrirse del verano, querer vitalidad, movimiento, actividad. Cansarnos de lo que todos los meses anteriores esperábamos.

Portugal. 

Vecinos de tienda de campaña con guitarras y camping gas.
Canciones que se convierten en únicas de un lugar. 

Escribir en tonos marrones porque pronto las hojas se caerán y otra estación se manifestará.